La primera objeción que surge en nuestra mente es la pregunta, ¿los valores que se originarán serán superiores a los valores actuales siendo calculados sobre el valor monetario o material y transferidos al valor del ser humano?
Podemos asegurar que en todos los casos en que se respete las disposiciones expuestas, los valores originados por los entes de cualquier nivel, cubrirán ampliamente las creaciones sobre este sistema en su complejidad porque exalta al ser, desde luego, es evidente que su importancia se ha de adoptar al volumen de cada ciudadano. Entonces es fácil en efecto imaginarse que los beneficios logrados por un ente, se encuentra multiplicada por el número de ciudadanos y que la realización para el resultado final se encontrará igualmente multiplicada por el número de participacion de los ciudadanos.
Reflejaremos un ejemplo ocurrido en Francia con el sistema basado en el dinero:
En una fábrica de construcciones eléctricas con una nómina de aproximadamente de 4.000 personas, el coste del servicio de una sugerencia sobre un proyecto; para el ejercicio de la puesta en marcha en el año 1952, se ha podido calcular en 3.5 Millones incluyendo las cargas sociales y los gastos de oficina. La economía residual, después de la deducción del coste del servicio de las participaciones; y de las primas pagadas por la sugerencia aceptada, sumaban todavía 10 Millones de francos.
Las preguntas a flote serían:
¿ que pasaría si fuese en vez de 4.000 personas laborando en una sola función fueran 100.000 ?
¿ Que pasaría si no fuera una simple sugerencia, sino un proyecto en si ?
¿ Que exaltacion del ser tendria dandole el valor no al dinero sino a lo humano?
No son los únicos ni los principales objetivos que se puede alcanzar.
Fin del artículo.
